CHUCK JACKSON: ARRIVES! (Motown, 1968)
Fue uno de los barítonos más emblemáticos de la historia del soul. Un cantante que se movió entre la aristocracia de la música negra desde sus comienzos y que, aunque nunca alcanzó el estatus de súper estrella como muchos de sus amigos, llegó a acumular un importante caudal de talento y numerosos hits que flotan entre las canciones más escuchadas de la historia.
Originario de Carolina del Norte, Chuck Jackson empezó batallando en el circuito de gospel nacional con los Raspberry Gospel Singers donde coincidió con un primerizo Sam Cooke, que destacaba al frente de los Soul Stirrers y con el que entabló una profunda amistad. Chuck pasó a formar parte de la legendaria banda de doo wop Del Vikings y, aunque no pudo grabar en ninguno de sus álbumes, realizó unas cuantas giras con ellos.
Pero su verdadera oportunidad le llegó de la mano de Jackie Wilson, cuando este decidió llevárselo de gira corno telonero. Con él recorrió los locales más emblemáticos del circuito soul y fue en el Apollo Theatre donde fue divisado por casi todas las compañías del momento, que se abalanzaron hacia Chuck, abrumados por su talento y su inequívoca puesta en escena. Y aunque algunas majors le hicieron suculentas ofertas, decidió empezar con Wand, el pequeño sello de Nueva York conducido por la intrépida y visionaria Florence Greenberg.
(El resto del artículo se puede leer en el libro Espíritus en la oscuridad. Viaje a la era soul de Andreu Cunill, publicado por la editorial 66 rpm).
Viaje a la era soul 